Los pagos fraccionados de IRPF son parte de las obligaciones fiscales de los autónomos. Debido a que no todos los ciudadanos pueden afrontar un pago único de IRPF, Hacienda ofrece a los contribuyentes la posibilidad de realizar el pago de sus impuestos de manera fraccionada, de modo que resulte más cómodo.
Estos pagos se realizan 4 veces al año. Usualmente, durante los meses de abril, julio, octubre y enero del año siguiente. Es por eso que se dice que funcionan como un adelanto del impuesto que se debe pagar a cuenta de la declaración de la renta.
Al realizar cada pago, debes presentar el Modelo Tributario 130 o 131, según el método que utilices para calcular el rendimiento de tu actividad. Cabe destacar que una vez Hacienda calcule la totalidad del IRPF que te corresponde según tu ingreso bruto anual, el organismo puede hacerte un reembolso si determina que has pagado más de lo requerido.
¿Quiénes deben hacer pagos fraccionados de IRPF?
Los pagos fraccionados son una obligación fiscal para todas las personas empresarias y profesionales, a excepción de:
- Quienes desarrollan actividades profesionales y, al menos, el 50% de sus ingresos fue objeto de retención o ingreso a cuenta en el año anterior
- Quienes desarrollan actividades agrícolas o ganaderas y, al menos, 70% de sus ingresos provenientes de explotación fueron de retención o ingreso a cuenta en el año anterior, con excepción de las indemnizaciones y las subvenciones corrientes o de capital.
¿Cómo se calculan los pagos fraccionados de IRPF?
Para calcular los pagos fraccionados, pueden presentarse dos escenarios: en estimación directa o en estimación objetiva.
En el primero, se calcula el rendimiento neto que se ha tenido desde el primero hasta el último día de ejercicio correspondiente al trimestre al que se refiere el pago fraccionado. Entonces, corresponde pagar el 20% de ese importe menos los montos que ya se han pagado en anteriores pagos fraccionados.
En el segundo escenario, bajo estimación objetiva, se calcula el rendimiento neto de la actividad en función del primer día de ejercicio. Esa cantidad se multiplica por:
- 2% si no se tienen personas asalariadas
- 3% si hay al menos una persona asalariada
- 4% en los demás casos
Como excepción, en el caso de las actividades agrícolas, pesqueras, forestales o ganaderas; sin importar cuál es el método de determinación del rendimiento neto, los pagos fraccionados representan el 2% de los ingresos del trimestre, excluyendo las indemnizaciones y las subvenciones de capital.
Además, en todo caso, debes saber que esa cantidad siempre podrá ser objeto de reducciones y deducciones por diferentes motivos como:
- Tener derecho a deducción por inversión en vivienda habitual
- Realizar las actividades generadoras de ingresos en Ceuta o Melilla
- Realizar retenciones e ingresos a cuenta
- Tener una actividad económica cuyo rendimiento neto sea menor a 12000€
Consideraciones sobre los pagos fraccionados de IRPF
Para realizar los pagos fraccionados, debe presentarse una de las dos declaraciones trimestrales disponibles: el Modelo 130 o el Modelo 131 de IRPF.
- Modelo 130: este modelo tributario es el que presentan todos los autónomos y personas físicas obligadas a hacer pagos fraccionados y que empleen la estimación directa para tributar sus actividades económicas.
- Modelo 131: este modelo tributario es el que corresponde a todos los autónomos que tributan su actividad económica mediante estimación objetiva.
Implicaciones del pago fraccionado de IRPF
Al finalizar el año fiscal y presentar la declaración de la renta referida al ingreso bruto total de ese año, los pagos fraccionados que se han hecho hasta el momento pueden reducir la cantidad que se debe pagar. O bien, aumentar la cantidad que el organismo debe reembolsar.
En otras palabras, los pagos fraccionados de IRPF cumplen la función de abonar, poco a poco, al pago del impuesto que te corresponde por tu actividad económica.
Vale destacar que los cálculos mencionados anteriormente señalan un aproximado de cuánto debe ser el pago fraccionado mínimo. Sin embargo, el contribuyente puede hacer un pago superior si lo desea. Si en el futuro se determina que ha pagado más de lo que debería por concepto de declaración de renta, Hacienda se encargará de devolver lo que corresponda.
¿Qué sucede si los pagos fraccionados no se realizan a tiempo?
En el transcurso de un año fiscal, se deben realizar 4 pagos fraccionados durante abril, julio, octubre y enero. En concreto, las fechas para abonar los pagos fraccionados son:
- Desde el 1 al 20 de abril
- Desde el 1 al 20 de julio
- Desde el 1 al 20 de octubre
- Desde el 1 al 30 de enero
Cuando un contribuyente incumple con uno de los pagos fraccionados de IRPF o lo hace más tarde de lo establecido, recibirá una multa que incluye intereses por demora. Para ayudarte a gestionar tus pagos fraccionados y demás impuestos, deja tus finanzas en las manos de nuestros profesionales en Grup Sisquella.